La expedición a cargo de Don Diego de Rojas

La fundación de ciudades fue uno de los instrumentos fundamentales para la conquista y fundación del territorio por parte de los españoles. De todos modos, esta tarea no fue sencilla. Al desconocimiento del territorio se sumaban los conflictos internos entre los diferentes grupos de conquistadores y aveces a la escasez de recursos. La complejidad de la conquista de la región noroeste argentino estuvo estrechamente vinculada a la resistencia de las poblaciones originarias que, hasta ultimo momento se negaron a someterse a los españoles.

Luego de la conquista del Perú en 1532, la región del Tucumán fue explorada por los españoles con el propósito de encontrar alguna vía de conexión entre el Perú y la zona del Dio de la Plata. En el Perú un conflicto de proporciones se habían generado por las oposiciones de los encomenderos de aceptar la aplicación de las leyes nuevas del 1542 que limitaba el régimen de encomiendas, prohibieron, entre otras cuestiones, el servicio personal como parte de la tributación de las poblaciones indígenas.
Para resolver este conflicto fue enviado por la corona Cristóbal Vaca de Castro.

Tiempo después, en 1543, apaciguado el conflicto entre Perú, Vaca de Castro autorizo la expedición de Diego de Rojas para que partiera desde el Cuzco rumbo hacia el sur. Lo acompañaba Felipe Gutierrez como capitán general y Nicolas de Heredia como maestre de campo de la tropa. 

Un hecho fortuito hizo que la expedición, en vez de seguir a rumbo al reino de Chile, avanzara hacia el este, cruzando el valle de tafí llegara a la zona de la llanura conocida como "El Tucman".

Aun que durante la expedición de Rojas no se fundo ninguna ciudad, esta permitió el conocimiento del territorio y abrió las puertas a la conquista española en la región del noroeste argentino.

Para ello utilizo el viejo camino de Inca, ya que había sido recorrido en 1535 por Don Diego de Almagro al pasar en dirección a Chile Diego de Rojas llego a la región de Monteros, bajando por la quebrada del Portugués. 

Tanta la expedición de Almagro como la de Rojas fueron atacadas por pueblos originarios. "desde su inicio, entonces, los indígenas conspiraron para impedir y hostigar a los nuevos invasores, con practicas ya experimentadas durante la conquista Incaica". Ese fue el motivo principal por el que la expedición liberada por Rojas solo pudo llegar hasta la actual provincia de Santiago del Estero, en donde murió al recibir una flecha envenenada.

Francisco de Mendoza siguió al mando de la expedición, lo que genero cierto malestar en el interior de la tropa ya que, por orden jerárquico, corresponde a Heredia asumir la jefatura. De todos modos la comitiva avanzo hasta el litoral donde fueron atacados por las poblaciones originarias en defensa de su territorio. Allí decidieron regresar al Perú. Francisco de Mendoza finalmente murió victima de una insubordinación en la actual provincia de Cordoba. Nicolas Heredia, el ultimo de los jefes que quedaba con vida, tomo el manda para retomar al Perú en el año 1546.

Esto fue vital para la incorporación efectiva del territorio actual noroeste argentino, región clave para la integración del Perú con el Río de la Plata, el Paraguay y el Chile.